Historia de la fiesta
De cómo en 1961 llegó, para instalarse en este bello pueblo de la Provincia de Teruel, la Patrona de Valencia.
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El 25 de Junio de 1961 llegó a Mora de Rubielos la imagen de la Virgen de los Desamparados.
Tras años de preparativos, el matrimonio formado por Miguel Bellver (de Cuatretonda-Valencia) y Aurora Martín (de Mora de Rubielos-Teruel) consiguieron hacer realidad el sueño de encontrar un hueco en Mora para esta advocación Mariana. Y regalaron al pueblo de Mora la imagen que el maestro Estupiñá realizó en sus talleres. El mismo que en 1966 instaló una réplica en la capilla de la Adoración, en la girola de la Iglesia de Santa Catalina de Valencia.
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Aquel 25 de Junio, gran parte de la población de Mora acompañó a la imagen de su patrona, la Virgen del Pilar, en el recorrido que hizo desde la Iglesia Parroquial de Santa María hasta las afueras del pueblo, por el puente del Milagro (hoy puente viejo) para recibir…. “a la que venía de Valencia”. A continuación , las dos juntas entraron en la que sería su sede hasta el día de hoy, en la Iglesia Parroquial, Excolegiata de Mora de Rubielos.
A lo largo de estos años su ubicación ha cambiado al menos en dos ocasiones. Primero se colocó en la pared lateral izquierda, al fondo, junto al coro. Posteriormente pasó a la capilla bautismal. Y actualmente se encuentra en la primera capilla de la Iglesia a la derecha del altar, junto a la entrada a la Sacristía.
Desde entonces, todos los veranos , el domingo posterior a la Virgen de Agosto, celebramos esta Fiesta
Durante los primeros años, entre 1962 y 1972, la Camarera Perpetua, Aurora Martin, estuvo acompañada de un grupo de clavariesas cambiante todos los años. Excepto en el año 1967, ya que el 5 de Junio Falleció Miguel Bellver Martin (hijo de ambos) y no hubo Fiesta.
Desde que en el año 1976 falleciese Aurora, su hija Aurorín (1984 +), procuró (junto con su marido Vicente (1990 +) que la fiesta se celebrase puntualmente el fin de semana siguiente a la festividad de la Virgen de Agosto. Razón por la cual, los sucesivos “encargados” hemos venido realizando una parada en el recorrido de la Virgen, cuando pasaba por delante de su casa, junto a las escaleras del puente de entrada al pueblo (en la carretera). Signo de respeto y sobre todo de gratitud. Es de bien nacidos…
Girar a la Virgen para que salude a su “Imagen hermana” La Virgen del Pilar (frente al puente del Milagro o Puente Viejo), ha sido una constante que se ha repetido durante todos los años. Así como “girarla hacia Valencia” cuando pasa junto al puente Nuevo de la carretera de Valencia.
Entre 1970 y 1975, recordamos a los hermanos Tarazaga, la familia Torres, y sobre todo los hermanos Izquierdo Villaplana (Antonio y Jaime), que junto a sus padres (Antonio y Tonica), fueron nuestros transmisores directos de este precioso legado.
Todos ellos forman parte de los recuerdos de una época que necesitaríamos completar.
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En el Año 1976, cuando a principios de Agosto descubrimos que debido al fallecimiento de Aurora, no iba a haber Fiesta, Chimo Alegre junto a Pedro Sancho y un montón de amigos, (Juan Lledó, Enrique López, Miguel Ángel Sancho, Fernando Hinojosa, Mª Pilar Cárcel, Mª Pilar Escriche, Paqui Chirivella, Vicente Galiano, Rafa Alegre, Isidro Torres, Amparo y José Luis Ros, Mª Carmen y Mª Teresa Torres, Ramón Conillera, Susi Torres, Alfonso Fernandez, Demetrio Sancho, Isabel Oliveira, etc.) hablamos con Aurorín quien nos autorizó y animó a preparar la Fiesta de ese triste año.
En 1979, con la ayuda del nuevo gobierno municipal conseguimos poner nuestra programación de actos, dentro del programa de Fiestas anuales de la villa. Y además de los que ya estábamos, conseguimos incorporar a un montón de amigos venidos exprofeso para dar lucidez y alegría a nuestra Fiesta. Algunos de ellos, se quedaron y todavía están (Paqui Chirivella, Carmen Esteve y Oscar Dejean, entre otros)
Entre los años 1983 y 1992, transcurrió un periodo en el que por circunstancias personales de la mayoría (estabilización laboral, bodas, nacimientos de hijos…) se encargó de la Fiesta el grupo que la hizo llamar "Fiesta de los Veraneantes”. Los documentos que se conservan de ese periodo hablan de Javier Miguel Escriche, Mercedes Marco Vila, Manolo Sancho, Susana Torres Martín, Inmaculada Miguel, Lucía Miguel, y otros amigos que mantuvieron el espíritu de la Fiesta durante este periodo.
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Desde 1993 nuestro objetivo ha sido y es mantener el espíritu religioso de la Fiesta, Ofrenda de Flores, Misa mayor y Procesión. Dejando para otros los aspectos más lúdicos. Muchos recordaran que durante muchos años el único toro embolado que se hacía en el mes de Agosto, era el de la Fiesta de los Valencianos. Calificativo, con el que se conocía la Fiesta de la Virgen de los Desamparados.
El año 1993 es el que, con el estímulo y apoyo de Vicente Cárcel (Vicente el majo para los que lo queríamos), iniciamos el periodo en el que ahora nos encontramos. José Mª Benito, Mª Pilar y Amparo Cárcel, algunos “veteranos rescatados”, y José Manuel Mas en estos últimos años.
Durante trece años consecutivos y sin excepción, se repetía el siguiente diálogo:
“Chimo, este año la gente no está siendo demasiado generosa”
“No te preocupes Vicente, la Virgen sabe que lo que falte lo pondremos nosotros…y el año que viene más.”
El 14 de Marzo de 2006 nos dejó Vicente y esta conversación…ya no se repetirá.
Tampoco David nos podrá acompañar al órgano...
Ni Ángeles Juan (mi madre) pondrá a punto las joyas de la Virgen…
Dicen que nadie somos imprescindibles. Probablemente sea cierto, pero ¡qué difícil es de entender!
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En el año 2011 celebramos el cincuentenario de la Fiesta, con la presencia de D. Juan Miguel Bellver Ribes, nieto de Miguel y Aurora que hasta su fallecimiento en 2016 no dejó de respaldar la Fiesta de sus abuelos.
En 2017 se persona Miguel Bellver Sintes, hijo de Juan Miguel y bisnieto de Miguel y Aurora, que en la actualidad sigue mostrando en todo momento su agradecimiento por el trato que su familia recibe por parte del pueblo de Mora.
Es norma en la dinámica actual de esta Fiesta, intentar implicar a la mayoría de las personas e instituciones que deseen velar por su mantenimiento. Procurando siempre que los recursos utilizados repercutan directamente en el pueblo de Mora, que tanto queremos.
Chimo Alegre Juan
20 Mayo 2020
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